Durante la sesión del Concejo Metropolitano de Quito realizada el martes 17 de junio, los ediles capitalinos expresaron su profunda preocupación por el alarmante incremento de la violencia en la ciudad. De acuerdo con los datos presentados, los homicidios intencionales han aumentado un 30 % en lo que va del 2025, lo que ha llevado a las autoridades locales a exigir al Gobierno Nacional una mayor presencia policial en las calles.
La Secretaria de Seguridad, Carolina Andrade, compareció ante el Concejo y expuso los esfuerzos del Municipio por mejorar la situación. Indicó que entre 2023 y 2024 se han invertido 12 millones de dólares para reforzar el equipamiento de la Policía Nacional. Esta inversión permitió entregar 134 patrulleros, 202 motocicletas, escáneres vehiculares, software forense y otros recursos tecnológicos.
“No se trata solo de presencia policial, sino de presencia estratégica y equipada con tecnología de punta”, afirmó Andrade. También destacó que gracias a estas acciones se ha logrado reducir la tasa de homicidios en algunos sectores, pasando de 10 a 8 casos por cada 100.000 habitantes entre 2023 y 2024. No obstante, enfatizó que aún se necesitan medidas más agresivas, especialmente en zonas vulnerables.
Los barrios del sur de Quito —como Solanda, Quitumbe, Guamaní y La Lucha de los Pobres— han reportado un incremento constante de robos, extorsiones y asesinatos. Según la Policía, estos sectores se han convertido en epicentros de la violencia urbana y requieren una respuesta inmediata.
Los concejales expresaron su respaldo a la Secretaría de Seguridad y coincidieron en la urgencia de fortalecer las acciones en territorio. Propusieron operativos focalizados, mayor inteligencia criminal, más patrullajes nocturnos y coordinación directa entre el Municipio y el Ejecutivo. Algunos ediles alertaron que la falta de acción puede convertir estos barrios en zonas dominadas por bandas delictivas.
Además del aumento en los homicidios, los informes policiales revelan que hasta mediados de mayo ya se habían registrado más de 94 asesinatos, lo que representa un incremento del 32,4 % en comparación con el mismo periodo del año anterior.
El Concejo de Quito insistió en que la seguridad ciudadana debe ser una prioridad nacional y pidió al Gobierno que tome decisiones urgentes para contener la escalada de violencia que afecta a la capital del país.