El presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), Leonidas Iza, respondió al Gobierno que se ha retirado de la mesa de diálogo con el movimiento indígena y los poderes del Estado.
A su criterio, no se debe renunciar al diálogo. “No puede ser una imposición (el diálogo) ni de un lado ni de otro. Mucho menos con condicionamientos”.
Iza señaló entonces que: “Está muy complejo y alejado de la realidad pretender que al quitar la voz de un dirigente, así no va a funcionar (…) Jamás hemos pretendido quebrantar la democracia”.
Por otro lado, ante los actos vandálicos en la capital, el líder indígena remarcó que “la movilización no ha sitiado a Quito, lo que ha sitiado al Ecuador es la inseguridad y el narcotráfico”.
“Lo que pasó ayer en Shushufindi ha generado nuevamente tensión”, reconoció. En el sitio fue atacado un convoy en el que un militar falleció y 12 resultaron heridos.
Insistió entonces que “este pueblo ha venido por resultados, no hemos venido para hacerle daño a nadie”.
Añadió que, en esa línea, que dejan extendidas las garantías necesarias para que el proceso de diálogo tenga un fin. “Y podamos encontrar la respuesta la mayoría de ecuatorianos”.
Solicitó que la iglesia católica interceda en el proceso de diálogo. Y pidió que se garantice la seguridad en las casas de acogida que han ocupado los indígenas.
Pidió a quienes han bloqueado las vías que permitan el paso de camiones que distribuyen gas, alimentos y gasolina.
“Estrechamos la mano con el objetivo de concluir este proceso de diálogo y superar cualquier otro en el Ecuador. Pido que se garantice la paz”, cerró Iza.