Una cámara de seguridad captó un alarmante intento de atentado ocurrido cerca de un mercado en el suroeste de Guayaquil, la noche del miércoles 25 de junio, aproximadamente a las 22:30. El incidente dejó conmocionados a los residentes y comerciantes de la zona, quienes exigieron mayor presencia policial ante el creciente nivel de violencia.
En los videos de vigilancia, se observa a dos sujetos involucrados en el hecho. El primero deja abandonado un cilindro de gas doméstico en plena vía pública. Momentos después, un segundo individuo aparece en escena, rocía un líquido inflamable sobre el cilindro y le prende fuego, generando un foco de incendio en un área concurrida, lo que puso en riesgo la integridad de transeúntes y negocios cercanos.
Policía investiga posible vínculo con bandas delictivas
Las autoridades locales investigan si el hecho responde a un acto de intimidación vinculado con bandas criminales, que operan en sectores populares de la ciudad. Hasta el momento no se han reportado víctimas ni daños materiales de gravedad, pero el suceso ha encendido las alarmas.
Fuentes policiales indicaron que están analizando los videos para identificar a los responsables y determinar su motivación. “Este tipo de acciones no pueden ser minimizadas. Poner en riesgo a la población con explosivos o fuego es un delito grave que será sancionado con todo el peso de la ley”, expresó un portavoz de la Policía Nacional.
Además, se evalúa si este acto podría estar relacionado con los patrones de extorsión a comerciantes, práctica que se ha incrementado en los últimos meses en Guayaquil, especialmente en zonas donde operan mercados y negocios de alimentación.
Vecinos exigen medidas urgentes ante ola de violencia
Vecinos del sector donde ocurrió el intento de atentado denunciaron que este no es el primer episodio violento en la zona. “Vivimos con miedo constante, no sabemos si nuestros negocios o familias están seguros. Queremos patrullajes, queremos que el Estado actúe”, señaló un comerciante afectado.
Las autoridades locales no descartan reforzar los controles en mercados municipales y sus alrededores, como medida de prevención frente a posibles ataques similares. El uso de explosivos improvisados o fuego como método de amenaza se ha vuelto una táctica cada vez más común entre grupos delictivos, según reportes de inteligencia.