En los últimos días se ha reportado un problema en la morgue de Guayaquil: dos de los tres contenedores refrigerados instalados en el área de almacenamiento de cuerpos han presentado fallas. Según información extraoficial, la avería fue detectada esta semana y afecta directamente al sistema que se utiliza para preservar cadáveres en el lugar.
Los contenedores refrigerados fueron implementados durante la pandemia del COVID-19 como medida para hacer frente a la creciente demanda de espacio para cuerpos, especialmente durante los momentos más críticos de la crisis sanitaria. Sin embargo, dos de estos equipos ahora presentan problemas, lo que podría comprometer la capacidad de la morgue para manejar la creciente acumulación de cuerpos no identificados o no reclamados.
De acuerdo con los primeros informes, al menos 40 cuerpos se encuentran almacenados en el único contenedor que sigue funcionando correctamente. Estos cadáveres corresponderían a personas que no han sido identificadas o que han permanecido en la morgue sin ser reclamados por sus familiares durante más de seis meses. La situación ha generado preocupación, ya que la infraestructura de la morgue, que en su momento se adecuó para enfrentar la emergencia sanitaria, ahora enfrenta dificultades que podrían afectar el tratamiento adecuado de los cuerpos.
Aunque las autoridades no han ofrecido declaraciones oficiales sobre las medidas que se están tomando para reparar los daños, se espera que la Administración de la Morgue de Guayaquil y las autoridades locales tomen acciones inmediatas para solucionar el problema y evitar que más cuerpos queden en riesgo.