Ecuador enfrenta una creciente incidencia de bandas delictivas en varias provincias, lo que ha llevado al Gobierno a declarar un estado de excepción en seis provincias y dos cantones desde el 3 de octubre. Esta medida, que se extenderá por 60 días, responde a la grave conmoción interna provocada por el conflicto armado interno declarado el 9 de enero de 2024.
La reciente caracterización de estas bandas como Grupos Armados Organizados (GAO) ha suscitado preocupaciones sobre su estatus legal y político. Renato Rivera, director del Observatorio Ecuatoriano del Crimen Organizado (OECO), advirtió que, al igual que en Colombia, esta categorización podría dar a estos grupos un estatus político que no corresponde con la realidad ecuatoriana, donde, según él, las organizaciones criminales carecen de una ideología política clara.
Rivera enfatizó que, a diferencia de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), las bandas ecuatorianas no buscan un fin político, sino que están motivadas principalmente por beneficios económicos. El Decreto Ejecutivo 410, que establece el estado de excepción, se apoya en una metodología de análisis del Centro de Inteligencia Estratégica (CIES).
El estado de excepción se aplica en las provincias de Guayas, Los Ríos, Manabí, Orellana, Santa Elena y El Oro, así como en el Distrito Metropolitano de Quito y el cantón Camilo Ponce Enríquez. Esta medida incluye un toque de queda en algunas localidades, restringiendo la movilidad de 22:00 a 05:00 en trece cantones de Los Ríos y varias zonas de Guayas y Orellana.
El objetivo de estas restricciones es combatir el incremento de la violencia de los Grupos de Delincuencia Organizada (GDO), que ha afectado gravemente el orden público y los derechos de los ciudadanos. El Gobierno ha identificado la presencia de estos grupos en las jurisdicciones donde se implementa el estado de excepción, lo que ha llevado a operaciones focalizadas para desarticular sus actividades.
Incidencia de los GAO en las Provincias:
- Orellana: Se ha incrementado la influencia de Los Choneros, especialmente en la minería ilegal y el transporte de drogas. Los Lobos también intentan ingresar a la región.
- Santa Elena y Guayas: Aquí operan todos los GAO y GDO, que se disputan el control territorial y las rutas hacia los puertos del golfo de Guayaquil, convirtiendo a Guayas en la provincia con mayor conflicto del país.
- El Oro y Camilo Ponce Enríquez (Azuay): Los Lobos predominan en estas áreas, vinculándose con actividades de minería ilegal y narcotráfico, enfrentándose a Los Choneros en el control de territorios.
- Los Ríos: Esta provincia sirve como centro de acopio para sustancias ilegales. Tanto Los Lobos como Los Choneros operan aquí, involucrándose en extorsiones a vehículos de carga pesada.
- Manabí: Los Choneros han controlado históricamente el tráfico marítimo de drogas hacia Centroamérica, pero tras la fuga de su líder, Adolfo Macías Villamar, han surgido células de Los Lobos que están ganando terreno.
- Durán: Este cantón presenta una dinámica distinta, con bandas que controlan diversas actividades municipales, además del narcotráfico.
