El temido pez con dientes humanos ataca a turistas en balneario sudamericano: es pariente de la piraña y su mordida es más poderosa

INTERNACIONAL

Una especie de pez proveniente de la cuenca amazónica está causando preocupación entre los bañistas de un conocido balneario sudamericano. Se trata del pacú, un pez con dientes sorprendentemente parecidos a los de los humanos, pariente cercano de la piraña, pero con una mordida aún más potente.

El pacú, que suele habitar en aguas dulces del Amazonas, ha sido visto en zonas turísticas donde antes no era común. En las últimas semanas se han reportado ataques a bañistas, generando temor entre los visitantes. Aunque no es considerado tan agresivo como la piraña, su anatomía dental y su fuerza mandibular lo convierten en una especie a la que se debe prestar atención.

¿Qué es el pacú y por qué preocupa?

El pacú es un pez omnívoro que puede llegar a medir hasta 90 centímetros y pesar más de 25 kilos. A diferencia de su pariente la piraña, que tiene dientes afilados y triangulares, los del pacú son planos, rectos y sorprendentemente similares a los de los seres humanos. Están diseñados para triturar frutos, semillas y vegetales, aunque también pueden causar lesiones si se sienten amenazados.

Lo que más alarma a los expertos es que este pez ha sido encontrado en balnearios donde no es originario, posiblemente debido a la liberación intencional o accidental por parte de humanos. En estos nuevos entornos, sin depredadores naturales y con abundante alimento, el pacú puede reproducirse fácilmente y alterar el equilibrio ecológico.

Reportes de ataques en balnearios

En un reciente incidente, varios turistas sufrieron mordidas mientras nadaban en un río turístico. Las autoridades sanitarias locales confirmaron que las heridas eran compatibles con las que podría causar el pacú. Si bien ninguna víctima sufrió lesiones graves, se ha recomendado precaución a quienes visitan las zonas afectadas.

Biólogos advierten que estos peces, aunque no atacan sin provocación, pueden reaccionar defensivamente si se sienten invadidos o acorralados. También se especula que el alimento arrojado por los turistas al agua podría estar atrayendo a los pacúes a zonas más concurridas.

Medidas de prevención y recomendaciones

Las autoridades ambientales y municipales están investigando cómo esta especie ha llegado a estos lugares turísticos y ya evalúan posibles medidas de control. Entre las recomendaciones se incluyen evitar alimentar a los peces, no bañarse en zonas con alta presencia de fauna silvestre y reportar cualquier avistamiento inusual.

El caso del pacú ha encendido las alarmas sobre las consecuencias de introducir especies exóticas en ecosistemas ajenos, una práctica que puede traer consecuencias imprevistas tanto para el medioambiente como para la seguridad de los seres humanos.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *