En un reciente comentario, el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, se mostró confiado al evaluar sus primeros 100 días de gestión, señalando que aún queda mucho por hacer. A pesar de los desafíos y las críticas que han marcado su llegada al poder, Trump dejó claro que este es solo el comienzo de su agenda, insinuando que lo mejor está por venir.
«Solo acabamos de empezar. Aún no han visto nada», dijo Trump en un evento en el que celebró sus primeros tres meses de gobierno. El expresidente destacó que la población estadounidense aún no ha sido testigo de todo lo que su administración tiene planeado implementar, lo que genera expectativas sobre las políticas y reformas que se avecinan.
Durante sus primeros 100 días, Trump logró avances en varios frentes, incluyendo la firma de órdenes ejecutivas que apuntan a recortar regulaciones, reducir impuestos y promover la creación de empleos en sectores clave. Sin embargo, su mandato también ha estado marcado por una serie de controversias, como las tensiones con los demócratas en el Congreso y las críticas sobre su manejo de la pandemia de COVID-19.
Pese a estos obstáculos, Trump ha insistido en que su gobierno está en camino de cumplir con las promesas que hizo durante su campaña electoral. En particular, ha subrayado su enfoque en la reactivación de la economía, la implementación de políticas de inmigración más estrictas y la promoción de una política exterior más agresiva.
El expresidente también destacó que las decisiones que ha tomado hasta ahora son solo la punta del iceberg, insinuando que, en los próximos meses, habrá más cambios significativos. Aseguró que su equipo sigue trabajando en nuevas estrategias para abordar los problemas económicos, sociales y de seguridad que enfrenta el país.
Uno de los temas que más ha abordado en sus discursos es el de la economía. Según Trump, sus políticas de desregulación y sus esfuerzos por fomentar el crecimiento económico han sido un éxito, aunque algunos analistas sugieren que los beneficios no serán tan evidentes a corto plazo. En cuanto a la política exterior, su postura ha sido clara: priorizar los intereses de Estados Unidos sobre acuerdos internacionales que, según él, no han beneficiado al país.
Los próximos 100 días de su gobierno serán clave para medir el impacto de sus políticas y para evaluar cómo maneja los desafíos internos y externos. A medida que la administración Trump avanza, las expectativas continúan siendo altas, especialmente entre sus seguidores, que esperan ver resultados tangibles en temas como empleo, impuestos y seguridad nacional.
Trump también ha hecho énfasis en la importancia de mantener el apoyo de su base electoral, asegurando que sus seguidores seguirán siendo una fuerza decisiva en su agenda política. En este sentido, ha reiterado su compromiso con las promesas de campaña, aunque enfrentando la dura realidad de un Congreso dividido y una oposición decidida a frenar algunos de sus proyectos.
El expresidente concluyó su intervención recordando que las verdaderas reformas que marcarán su mandato están por llegar, y que su gobierno continuará luchando para implementar las medidas que, según él, devolverán a Estados Unidos a su «gloria». A pesar de las dificultades, Trump sigue reafirmando que su mandato apenas está comenzando, y que lo mejor está por venir.