Vinicio Alvarado, uno de los personajes más influyentes en las campañas del correísmo, ha experimentado una notable caída desde su rol como estratega político hasta convertirse en un hombre marcado por la justicia. En la actualidad, Alvarado cumple una condena de ocho años de cárcel como coautor del delito de cohecho, tras su vinculación con el escandaloso Caso Sobornos 2012-2016.
Alvarado fue una figura clave en las campañas presidenciales que llevaron al poder a Rafael Correa, Lenín Moreno y Andrés Arauz, quien, en 2021, fue el candidato presidencial de la Revolución Ciudadana (RC). El asesor de comunicación y estrategia política, que ocupó altos cargos como ministro de Turismo y Producción en el gobierno de Correa, se mostró como el “gurú” que lideraba el camino de esas campañas políticas. Sin embargo, tras su vinculación con casos de corrupción y un cambio en su figura pública, se ha convertido en un personaje alejado de la estima política que alguna vez tuvo.
De consultor político a procesado judicial
En septiembre de 2024, la entonces candidata presidencial Luisa González, de la Revolución Ciudadana, publicó en sus redes sociales un mensaje que causó revuelo. En este, mencionaba a Alvarado como parte de su equipo de trabajo. La publicación, que incluía fotos de ambos, mostraba que el exestratega de Correa seguía siendo una figura influyente en el entorno político ecuatoriano, incluso después de sus problemas judiciales. Sin embargo, ese equipo de trabajo no logró asegurarle la victoria a González, quien, tras pasar a la segunda vuelta, fue derrotada el 13 de abril de 2025 por el actual presidente Daniel Noboa, candidato de Acción Democrática Nacional (ADN).
La cercanía de Alvarado con los principales actores de la Revolución Ciudadana le permitió mantenerse como un jugador clave en el escenario político, a pesar de las acusaciones en su contra. Sin embargo, meses antes de este mensaje, la situación de Alvarado se encontraba en una dirección completamente distinta.
Nuevas revelaciones sobre su vínculo con el caso Liga2
En enero de 2025, una nueva revelación llegó a las manos de la Fiscalía. Durante una investigación sobre el caso Liga2, que involucra a Augusto Verduga, exintegrante del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (CPCCS), se descubrieron conversaciones relacionadas con Vinicio Alvarado. Estos diálogos fueron extraídos de uno de los dos celulares incautados a Verduga, el 24 de enero pasado. La información, que ya ha sido periciada y anexada al expediente fiscal, ha aportado más pruebas al caso, sumando más de 18,000 fojas al expediente judicial.
Las conversaciones encontradas entre Verduga y otros implicados en el caso evidencian el papel que Alvarado jugó, no solo en su vinculación con el correísmo, sino también en el contexto de otros posibles actos de corrupción. Esta nueva pieza dentro del caso Liga2 refuerza la imagen de Alvarado como un personaje envuelto en escándalos de corrupción, lo que ha llevado a que pierda la confianza de sus antiguos aliados políticos.
La transformación de Alvarado: De estratega a figura errática
Lo que antes fue una figura respetada y admirada dentro del entorno político ecuatoriano, hoy es un personaje «errático», como lo describen algunos de sus antiguos aliados. Su involucramiento en el caso Sobornos 2012-2016 y las nuevas implicaciones en el caso Liga2 lo han distanciado de la política activa, dejando atrás una carrera que estuvo marcada por la dirección de importantes campañas presidenciales.
Hoy, la figura de Vinicio Alvarado se encuentra en el centro de un proceso judicial que podría cambiar su futuro para siempre, mientras su nombre sigue siendo parte de los debates sobre la corrupción y el manejo del poder en Ecuador.